La cultura del esfuerzo en las aulas
La educación es una de las competencias más controladas por parte de las instituciones públicas debido a su importancia e influencia sobre las futuras generaciones de un país. Es también a través de ellas como los países compiten entre sí con tal de conseguir el 1.º puesto en el ranking de los países con una mejor educación. Generalmente, estos rankings se basan en los resultados de los alumnos, así como la continuidad formativa que siguen.
En primer lugar, hay que mencionar que dichos resultados no son objetivos debido a que no tienen en cuenta el esfuerzo que realizan. Tal y como se ha mencionado con anterioridad, dichas estadísticas se basan en sus resultados, por lo que lo único que se tiene en cuenta es cómo de bien lo hacen en los exámenes. Órganos externos al gobierno afirman que la solución a un sistema educativo averiado es la implementación de la educación no formal 2 o el uso de la evaluación continua, en la que las calificaciones del alumnado se construye a partir del trabajo que realizan día tras día.
Por otro lado, podemos afirmar que las valoraciones que se hacen sobre la educación de un país no terminan de ser 100% representativas si entendemos el fin de la educación en todos sus espectros, sin solo relacionándolo con la institución educativa. Es decir, no solo se debería tener en cuenta también el importante papel que tiene el empeño que ponen los estudiantes con tal de realizar un “buen curso”, sino que también debería entenderse la educación y todo aquello que implica. Con esto último nos referimos al trabajo que se lleva a cabo en casa.
En resumen, viendo la situación actual de las y los estudiantes españoles, podemos afirmar, gracias a datos del periódico ABC Sociedad, que el esfuerzo es claramente una actitud que se vive en las aulas. El problema es que las instituciones no lo tienen en cuenta y sus resultados sobre su sistema se ven alterados por los resultados de un sistema educativo con heridas que debe ser arreglado urgentemente.



Comentarios
rulparty - hace más de 2 años
¡Muy interesante!
Más allá del esfuerzo, ¿crees que se deberían tener en cuenta otras cuestiones para valorar la calidad de la educación?
chupiparty - hace más de 2 años
¡Guau! Me gusta tu artículo. Yo tengo una duda con lo que significa el esfuerzo en el aprendizaje. No sé si tú lo tienes claro: ¿Crees que es necesario esforzarse para aprender? ¿Existe el aprendizaje sin esfuerzo? ¿Es el esfuerzo sinónimo de un beun trabajo o de un buen resultado final? No sé... Ojalá escribieras otro artículo con esto. Jejeje
macrosoft - hace más de 2 años
Desde luego es imposible que escribiendo en un folio durante un ratito se valore completamente a una persona, sin tener en cuenta nada de lo que ha vivido, pero según los profes no hay otra manera...
¿A ti se te ocurre alguna? A mí me gusta de los trabajos que acabas aprendiendo mucho mientras investigas, y antes de entregarlo más o menos puedes valorar
bielso - hace más de 2 años
Hola macrosoft,
Pues al ser un estudiante activo, que participa en varias organizaciones de participación estudiantil, me he dado cuenta que de las mejores formas que hay para aprender es a partir de experiencias de otras personas así como la participación en "workshops" o "focus groups" en los cuales la metodología utilizada es el debate y el desarrollo de ideas.
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