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Secreto de niños

Publicado por its_m.eery el 15/04/2019 · Categorías: Sobre mí, Opinión, Reflexiones, Conocimientos, Sentimientos, Experiencias, Mundo, LGBTIQ

Como bien sabéis, del tema que más hablo con diferencia es del lgtbiq, y si, este post está muy relacionado con el tema, pero no en general, sino de mi historia y de la historia de muchas personas.

¿Alguna vez, habéis guardado un secreto, tan fuerte, que te da miedo que salga a la luz?, yo si, lo estoy guardando.

Da miedo que salga, ¿sabéis por qué?, críticas, por lo que la gente diga, por como pueda llevar yo el hecho de que haya salido a la luz, pero..., sobre todo, por esa persona.

Cuando un secreto no te afecta a ti, sino a otra persona, tienes muchísimos más miedos.

En cambio, prefieres esconderlo, para que no afecte a nadie, y que simplemente te afecte a ti, ya que eres la que empezó todo.

Simplemente, estas todo el día deseando soñar, deseando que pasen cosas que, en tu imaginación, parecen reales, pero sabes perfectamente, que solo son eso, imaginación.

¿Pensáis que los sueños pueden hacerse realidad?, yo, no.

Obviamente no hablo de los sueños de trabajo, de conseguir algo material, de ser alguien muy importante..., sino de los sueños de tu cabeza, relacionados con otra persona.

En mi opinión, esos sueños nunca van a ser reales.

Hay momentos en los que algunas personas pueden pensar..., "Ves, se está haciendo realidad", pero no, simplemente estás entrando en el sueño.

Como todo, los sueños acaban, y llega un punto, en el que si o si tienes que despertar, aunque quieras seguir soñando siempre el mismo sueño.

¿Sabéis lo que odio ese momento de despertarme?..., es horrible.

No solo es despertarse, es asumir que o que tú estabas sintiendo como algo real, no lo es.

Creías ser totalmente consciente de que era un sueño, sin más, y que no iba a avanzar, pero..., cuando llega el momento de asumir totalmente de que era un sueño, es horrible.

Toca analizar tú sueño, pensar que hacer, pensar como avanzar sin que te afecte..., pero, sabéis, pienses lo que pienses, hagas lo que hagas, te parte cada día más el alma.

Cada noche te vas a la cama con la ilusión de soñar siempre el mismo sueño, pero llega un punto, que tú deseo no es ese, ahora, tú deseo es dormir, y no despertar de ese sueño, o despertar, y seguir en el.

Es como los niños, cuando sueñan con mounstruos, lo primero que quieren hacer es despertar, pero cuando sueñan con campos de flores, carreras, princesas, dragones, etc., no quieren que llegue la hora de despertarse.