Proyecto concurso: "Amistad" IV
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UN ADIÓS
Marta, Neus, Ignacio y María estaban todos de negro, se dirigían con cara fúnebre, el cielo había amanecido con Sol, pero poco a poco, el cielo se iba cerrando.
Se dirigían hacia el cementerio, al llegar el padre Jesús empezó la misa, Marta empezó a llorar estaba muy conmovida. Mientras el padre iba hablando la gemela fue trasladando su mente hacia el día 2.
Ese día, Laura empezó a sentir sus primeros síntomas: se mareaba constantemente y empezó a tener fiebre.
Pasaron los días y los síntomas se agudizaron. Fueron al medico y éste tristemente les comunicó que pasaba, tenia leucemia, y le quedaba poco más de un mes.
Al regresar a casa comunicaron la noticia a los chicos, todos se intentaron aguantar el llanto, pero a Marta le pareció imposible, y a pesar que no sabía muy bien de que podía tratar esa enfermedad, suponía que no era nada bueno.
María a excepción de los demás se quedo en estado de shock.
Neus, en cambio, estaba pensando en lo que sería la amistad después de eso:
La amistad tendría el mismo significado, solo que con más intensidad , además para ella Laura seguía estando allí, en cada uno de sus pasos, recordando como siempre la ayudaba en todo.
Marta también estaba absorta:
La amistad seguiría intacta, pese a que tenía poca edad sabía exactamente que nunca la olvidaría.
Ignacio por un momento también se olvidó del funeral, recordando lo vivido con Laura y recapacitando sobre lo ocurrido.
Para el la amistad siempre sería recordada.
Llegaron a casa, y se fueron a su cuarto, sin ganas de hablar.
Ignacio y Neus se fueron al dormitorio y Marta se quedó en el salón mirando hacia el vacío. Maria se sentó a su lado.
/5 años después/
Volvían a estar frente al cura, pero esta vez no de luto, sino, por una buena causa. Ignacio iba a casarse, y no solo eso, sino que en unas semanas sería padre. Una vez se sentaron todos, apareció una preciosa chica, con un vestido blanco con una larga cola y un velo que le tapaba su vello rostro, con una preciosa melena morena recogida. Y al altar, estaba Ignacio, más elegante que nunca, con un traje negro y una corbata azul. Junto a él, estaba su hermana, con un sencillo vestido, pero le favorecía mucho.
-Que buena pareja hacen. -Dijo Marta.
Maria afirmo con la cabeza.
Tras un largo sermón, el cura hizo la pregunta, pero al mismo momento apareció una preciosa chica, Ignacio tartamudeaba, no sabía que decir. Cogió la mano de la nueva chica y empiezan a correr todos, Maria junto al frutero, no sabía que decir.
Después de unas horas, Neus y Marta acompañadas de la que iba a ser la esposa de Ignacio, fueron a casa, la chica estaba destrozada por todo lo sucedido y no entendía nada. Maria junto a su novio el frutero, volvieron a la tienda.
La chica regresó a su casa.
En cuanto Ignacio y su novia: Josefina de Castro. El chico contó su historia, donde se habían conocido y como había surgido el amor. Desde la muerte de Laura los chicos no estaban muy alegres: no como antes. Pero se le veía contento, las chicas confiaron de nuevo en el, y bromeaban normalmente con bodas.
EL CAMBIO DE NEUS.
Hacía mucho tiempo que Neus estaba diferente, Marta que se había hecho muy amiga de ella se lo preguntó.
Neus no se lo quiso contar y marchó corriendo a su dormitorio, pero al pasar el día, le contó una parte.
-Lo que te voy a contar es difícil.- Dijo Neus.
-Puedes confiar en mi.
Neus permaneció en silencio y continuó su relato.
-Hace tiempo, cuando Laura aún estaba junto a nosotros teníamos un turbio romance. Fugitivo y a escondidas como en aquellas películas que tanto me gustan.
Marta no daba crédito a sus palabras, pero algo en su interior indicaba que decía la verdad.
-Pero prométeme que no se lo contarás a nadie, ni si quiera a mi hermano.
Marta lo prometió.
Pero Marta siempre que se encontraba con Neus sentía una profunda angustia por su pérdida.
Decidió hablar con ella y explicarle que tenía que superar este trauma, Marta le dijo que podía contarle todo lo que la atormentase.
Esa misma tarde Marta vio a Neus con otra chica, y por lo que se veía se gustaban.
Después de eso, cuando Marta y Neus volvieron a estar juntas, Neus le confirmó que ella y la chica habían empezado una relación, porque ya era hora de olvidarse de Laura.
Pero ahora quería ir al cementerio, a traerle flores a Laura.
Entonces fueron a buscar a María y a Ignacio, para que las llevaran al cementerio, ya que siempre iban todo el grupo juntos.
-Hace tiempo que no vamos a ver a Laura, ya es hora de que vayamos a visitarla.
-Yo le he comprado unas flores preciosas -dijo Marta.
-¡Yo conduciré! -dijo Ignacio.
Cogieron el coche y empezaron el camino.



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