Cibercorresponsales

Tu Destino: Capítulo 20

Publicado por forever el 01/08/2014 · Categorías: Creación

Nos teletransportamos al ático con el maestro, parece que nos estaba esperando

- Estoy orgulloso de vostros, hijos de dioses - nos dijo el maestro mostrándonos una sonrisa - me alegro de verte Juan - Juan le respondió con una sonrisa

- Maestro - empezó a decir Luna - ¿cuántos días han pasado desde que nos fuimos? - hubo un minuto de silencio

- Ninguno

- ¿¡¿¡Cómo?!?! - respondimos todos

- ¿Y qué hay del hechizo ese que dijo Lavorna que debías hacer o si no Juan moría? - pregunté yo

- Digamos que lo amañé todo y la engañé fingiendo que estaba deshecho, y lo estaba, pero cuando me enteré que Juan ya estaba asalvo lo volví a hacer. - todos nos quedamos con una cara de asombro. Estábamos alucinando.

- Entonces - empezó a decir Miguel - ¿Cuántos días han pasado en total?

- Sólo tres días - nos dijo

- ¿¡¿Qué?!? - exclamamos todos a la vez

- Entonces - empecé a decir - hoy debe de ser domingo - el maestro asintió y nosotros nos quedamos en silencio durante un rato

- Será mejor que volváis a vuestros hogares y que Luna - empezó a decir mirándola - rompa el hechizo - todos asentimos y nos dimos media vuelta.

Cada uno se teletransportó a su casa. Yo aparecí en la entrada de mi casa con ropa distinta, más bien con la ropa con la que salí de viaje y tenía mi mochila con toda la comida y todo con lo que me equipé

- Gracias Natiri - dije antes de entrar por la puerta de mi casa.

Ahora bien, no sé por qué cogí  la mochila y entré corriendo para ver si mis padres estaban en casa

- ¡Mamá!¡Papá! - no hubo respuesta, así que volví a intentarlo pero esta vez yendo al salón - ¿Mamá? ¿Papá? - fui a la cocina, luego salí al jardín, pero tampoco estaban allí. Así que subí al piso de los dormitorios y en el último escalón me paré - ¿Mamá? ¿ Papá?

- ¡En el despacho! - oí gritar a mi madre, así que subí corriendo al despacho y allí me los encontré, viendo una película y abrazados en el sofá

- Ya has vuelto - dijo mi padre - ¿Qué tal en casa de tu amiga? - me preguntó, pero en vez de responder fui a darles un abrazo.

Más sorprendidos estaba ello por lo que había hecho que yo, porque necesitaba a mis padres, nunca había hecho esto con ellos, pero es que estos días he pasado tanto miedo y he estado tan asustada que necesitaba verlos y abrazarlos

- ¿A qué viene esto? - preguntó mi madre respondiendo al abrazo

- Si, nunca lo habías hecho - dijo mi padre y yo me separé, pero no demasiado

- Digamos que os he echado de menos y... me apetecía - mi padres sonrieron

- Nosotros también - empezó a decir mi madre - la casa mi vacía sin tí - yo la respondí con una sonrisa

- ¿Vamos a cenar? - pregunté

- ¿No crees que es muy pronto? - dijo mi padre

- No, no ahora - empecé a decir - me refiero a ir a cenar, a un restaurante - mis padres se miraron entre ellos

- Me parece buena idea - dijo mi madre y les dí un beso a los dos

- Voy a ducharm y a cambiar - bajé corriendo las escaleras para hacer lo que dije.

 

 

Cuando salí de la ducha, me puse un vestido blanco con unos botines marrones y una cazadora vaquera. Fui a coger mi bolso cuando mi móvil sonó. Era Juan

- ¿Sí?

- Hola

- ¿Cómo conseguiste mi número?

- Lara me lo dio - me dijo, pero no me enfadé

- Osea que... le pides ha escondidas a una de mis amigas que te de mi teléfono pero que además averigüe si me gustas

- Sip, y ha funcionado - los dos reímos

- ¿Tuviste problemas en tu casa? - hice una pausa - Ya sabes, por lo de la batalla, tu secuestro

- La verdad es que no, ¿y tú?

- Tampoco

- ALex, vámonos - gritó mi padre

- Juan tengo que irme - empecé a decir saliendo de mi cuarto

- ¿A dónde te vas? - preguntó - ¿A quedar con tu novio? - sonreí

- Nop, a cenar con mis padres, mi novio está hablándome por teléfono retrasando la cena - Se rió y yo estaba apunto de salir por la puerta con mi padre esperándome para cerrarla

- Mañana van a alucinar cuando se enterén de que somos novios - pasé por delante de mi padre y le pregunté

- ¿Me esperas mañana en la puerta del colegio? - mi padre me miró con sus ojos de "con quién estaré hablando"

- Vale - sonreí - no llegues tarde

- Yo siempre llego puntual - baje y abrí la puerta del coche - tengo que dejarte, luego hablamos

- Adios - me dijo

- Hasta luego

- ¿Quién era? - preguntó mi padre - ¿Verónica?- Luego os lo cuento - pensé que sería mejor contárselo a mis padres durante lo cena lo de que tengo novio.

 

Llegamos al restaurante y cenamos estupendamente. Estuvimos hablando de la escuela, mis amigas, mi novio... un poco temas variados. Pero sobre todo, hablamos de mí, nada de reuniones ni del trabajo de mis padres, sólo de la vida de su hija. Llegamos a casa bastante tarde y yo estaba cansada para hacer los deberes, así que, por un día, no los hice, y me metí en la cama para descansar.

 

A la mañana siguiente ya era lunes y la alarma me sonó como de costumbre. Me levanté, me duché, me vestí, hice la cama, preparé los libros y bajé a desayunar. Mis padres como de costumbre estana con el ordenador y leyedo el periódico

- ¡Buenos días! - dije soltando la mochila en la entrada. Le dí un beso a mi padre y otro a mi madre. Me preparé el desayuno y me senté a desayunar.

- ¡Buenos días, Alejandra! - empezó a decir mi padre. Él siempre me llama Alejandra, dice que eso del mote de Alex no le gusta mucho, que mi nombre le gustaba demasiado como para llamarme como a un chico - ¿Has dormido bien?

- Sí gracias ¿y vosotros?

- También - me respondió mi padre

- ¿Qué hay de nuevo en el día hoy? - pregunté a mi padre que estaba leyendo el periódico

- Lo de siempre, la guerra en Israel, accidente en carretera, ayer ganó Atletic al Barcelona...

- ¡¡Oh mierda, es verdad, me perdí el partido!! - dije

- ¿Pero no eras de Real Madrid? - me preguntó mi madre

- Si, pero me gusta ver los partidos

- Déjala Inma, a ella siempre le ha gustado el fútbol - yo sonreí mientras mi padre tomaba un sorbo de la taza de café y me guiñaba un ojo, mi madre sonreía.

Terminamos de desayunar y mi padre me llevó al colegio como de costumbre. Juan estaba esperándome en la puerta, salí del coche y le besé. Entramos juntos de la mano luego cuando llegamos a su clase le despedí con otro beso y yo me dirigí a la mía. Durante las tres primeras horas estaba atenta ya que había perdido clases y luego en el recreo me dirigí con Carla a reunirme con las demás, y cuando estábamos en grupo me empezaron a preguntar por el beso que le dí antes a Juan y entonces apareció detrás mía y le dí otro beso. La mañana transcurrió rápido, pero lo que tengo claro es que mi destino no podría haber empezado mejor.

 

FIN