Mi Monólogo
Mi Monólogo
Una tarde lluviosa, mientras Esmeralda lloraba en su cuarto, su oso de peluche, Tedy, giró la cara para ver a su niña, esa niña a la que apreciaba y con la que lleva desde que nació.
Tedy le pregunto:
-Qué te pasa? Por qué lloras?
Ella, cogió aire y respondió:
-No sé qué...



