Cibercorresponsales

"La sangre y el arte que ensució tus manos"

Publicado por bely. el 03/08/2013 · Categorías: Solidaridad

Una de las razones por las que me enamoré de la historia cuando tenía siete u ocho años fue el simple hecho de sentarme en invierno en el sofá marrón, y descubrir entre las páginas el camino que había trazado el ser humano. La niña de entonces, se sentía orgullosa de dónde habíamos llegado, de la evolución. Y cuando veía las grandes torturas, los crímenes, la muerte y el dolor causados,  los observaba como un lejano pasado del que habíamos aprendido. Pobre ignorante. Luego aprendí, y aprendí a ver entre las calles lo que realmente nos rodeaba. El presente, que no era tan diferente del antaño, de los recuerdos de los libros del colegio. Me informé, continué leyendo,  apasionada y traumatizada de cada logro y desgracia. No entendía porque los extremos se tocaban tanto. Por qué podíamos llegar a una raza tan digna, y luego, al siguiente segundo, a una tan deplorable. Empecé a ser consciente, creando un pensamiento auto-crítico de nuestras situación, intentando que otros lo fueran. Que la revolución surgiera. Me enamoré más aún porque vi que el cambio era posible. Que el ser humano podía llegar a más. Hoy he perdido un poco de fe en ello.

Melilla. Ciudad española. Mi hermana, tiene un par de amigos allí. No duermen. ¿Por qué? Oyen gritos. De dolor y desesperación. Todas las personas que intentan cruzar la frontera española, desde África, acaban con varios disparos. Muertos. A sangre fría. Cuando me lo contó, pensé que era mentira, o que me hablaba de un país del Oriente, o de América del Sur. Pero no, en España también sucede. Nadie lo ve, nadie lo dice. Pero sucede. Ojalá me lo inventará, ojalá fuera sólo un artículo ficticio con moraleja, pero no, es real, y ACTUAL.  Con cuchillas o disparos, no importa. No paran de romper los derechos humanos.

"Entre los besos y los disparos. Entre el odio y el amor. Entre la sangre y el arte que ensucio tus manos. Entre las torturas y los abrazos. El sino, del ser humano. La naturaleza te hizo sabio y bueno pero la ambición sin freno fue tu perdición, tu gran veneno. Capaz de dar la vida o de humillar de un solo golpe , capaz de amar o ser un genocida por deporte , creaste palacios y pirámides por honor a tus líderes , las teorias de euclides y arquímedes, crímenes en serie como en Rostock, Hitler, Pinochet y Bolbot, paladines del complot, inventor de la escritura y la penicilina, ejecutor de culturas, Nagashaki e Hiroshima. Humano besa y asesina, abraza y recrimina, siempre. Si sus deseos le ciegan, delata y miente , de las flores de Versalles a las cárceles de Bangkok, voz de dictadores o pintores como Van Gogh, gente amor, la ternura la balanza está en tus manos, la decepción o la esperanza, ser humano. Los besos que se dieron ,los muros que distanciaron , los lazos que unieron , disparos que retumbaron ,los golpes que hirieron ,inventos que deslumbraron ,las luces y sombras que nombran al ser humano... "

¿QUÉ PODEMOS HACER? DEMOS UN POCO DEL LUZ DEL SER HUMANO.

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Es fácil, firmáis por una causa, os hacéis una cuenta, y gratuitamente, pudes reclamar por cualquier motivo que creáis que es una oscuridad. Para inundarlo de  luz. Luz y cambio.