El camión de juguete

Fue un día como otro cualquiera. Como todas las mañanas, bajé a comprar el pan. De camino, algo me llamó la atención: el llanto inconsolable de un niño pequeño. Al principio, no le di mucha importancia, hasta que giré la esquina y vi a ese niño: forcejeaba con su madre por un colorido camión de juguete, mientras que un hombre siniestro contemplaba la escena repitiendo una y otra vez:
- “Venga, que no tengo todo el día” .
En ese momento, la madre le arrancó el camión de las manos al niño y se lo entregó a aquel hombre, que le dio a la madre una bolsita con unos polvos blancos… ¡Era cocaína!
El niño se quedó sentado en el suelo, llorando, mientras su madre le abrazaba y con las lágrimas cayendo por sus mejillas le dijo:
- “Lo siento cariño… ¡Perdóname! Me metí en este sucio mundo de la droga y ahora necesito hacer lo que sea para conseguir más… ¡Esto es un infierno! “.



        
        
      
Comentarios
pollo serrano - hace más de 11 años
Que buena idea! Te felicito!
manu rbb - hace más de 11 años
gracias pollo!
julialalala - hace más de 11 años
¡Hala! Me ha encantado! Es corto pero expresa muchísimo!
manu rbb - hace más de 11 años
gracias :D
partyflipa - hace más de 11 años
¡Vaya! No me imaginaba para nada ese final. Pobreeeee
pablitosfc - hace más de 11 años
Es una historia breve, pero penetrante
pablitosfc - hace más de 11 años
espero que vuelvas a escribir algo asi
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