Tallas (capitulo 2)
SABADO 19
'Habian pasado algunos días desde que fui a probarme aquellos pantalones y desde que me derrumbé totalmente. Aquel día necesitaba hablar con alguien así que intenté contactar con mi mejor amiga, pero no me cogió el teléfono hasta la noche... sí, se notaba que le importaba mucho.
Tras contarle lo sucedido con las lágrimas cayendo de mis ojos, ella me contesto con un: 'Dios, Lau, que dramática eres tía, seguro que no es para tanto. Pero, ¿además no te estás quejando siempre de que no te gusta tu cuerpo? Pues ponte a hacer ejercicio y a comer menos, ya está, no le des más vueltas al tema.' Y tras esto me colgó.
Sus palabras fueron similares a dagas afiladas que se clavaron en mí, haciéndome sangrar y retorcerme de dolor, habría preferido algo menos doloroso que me ayudara en vez de hundirme más. Lo que más me dolía era la indiferencia que me había demostrado mi amiga, aunque no sabia de que me quejaba, ella siempre era así, aunque yo con ella no podía ser borde o indiferente, ya que sus problemas eran más importantes que los de cualquier otro ser humano en la tierra.
Mientras que los días pasaban, la idea de que estaba cansándome de ella y de que mi cuerpo estaba demasiado lejos de ser como esos perfectos que salían en las revistas crecían y se hacían más fuertes. Tomé decisiones, ya que iba a echar a Sonia (mi amiga) de mi vida por ser tan tóxica también iba a empezar a cuidarme, hacer ejercicio y comer menos, tomarme en serio los horarios de las comidas y demás.
Empecé con mi gran proyecto, aquel que por primera vez iba a ser un beneficio para mi y no un beneficio para otrxs, me sentía bien, estaba trabajando por mi felicidad, algo que nunca había hecho.
Aquella misma noche recibí una llamada de Sonia, aunque no se lo cogí de inmediato, tras varias llamadas y mensajes, decidí que era hora de hablar con ella.
-Menos mal que me lo coges, ¿qué narices era tan importante para que me dejaras "sola"- grito nada más empezamos hablar.- Tengo muchos problemas, muchos más de los que tú te crees y vas y me abandonas a la primera de cambio.
-Pues es lo que haces tú siempre, me "abandonas" como si nada, y siempre tus problemas tienen que ser más importantes que los de demás y no, no eres el centro del mundo- contesté con miedo.
-¿perdona? Pues claro que mis problemas son más importantes que los tuyos, no caber en un pantalón no es el fin del mundo, ¿sabes?- me rebatió con irá en la voz.
-Como si lo tuyo fuera tan importante, que un chico pase de ti no es el fin del mundo.
-Mira, tu no lo entiendes, él y yo somos distintos al resto, pero claro, tu nunca serás capaz de entenderlo, ¿quién se iba a fijar en alguien como tu?- estalló en carcajadas.
-Sonia, te estas pasando.- intenté disimular mi voz quebrada.
-¿ah si? Pues me alegro, enterate de lo que eres, que si chica, que estas gorda, y no hay remedio para eso, asumelo. ¿Cuantas veces has empezado con una dieta y has terminado hinchándote a bollos?- preguntó esperando una respuesta mía que obviamente no dí- Estoy esperando a que contestes.
-Muchas veces...
-Ves, no tiene remedio chica, ya esta, tu te sentirás muy mal contigo misma, pero, ¿a quién le importa, chica? A nadie, tus problemas no son nada.- dijo en tono de victoria.
-Tus problemas tampoco me importan.- No era capaz de continuar una frase, por miedo a que se me rompiera la voz allí, en medio de aquella conversación.
-Mira, te lo voy a dejar pasar porque es obvio que no estas bien, pero lo mio es importante ¿sabes? Tienes que ser mi mejor amiga y por ello siempre tienes que estar a mi entera disposición, escuchar lo que te cuente y dejarte de tonterías porque mis problemas si son importantes, ¿vale? Pues a lo que iba...- intentó empezar hablarme de sus cosas, pero tomé valor y le contesté.
-Buscate a otra que este detrás de ti las 24 horas y que te aguante, porque yo ya estoy cansada. ¿sabes? Estoy hasta las narices de tener que escuchar siempre como te quejas de que tus problemas son mayores que los de ningún otro ser humano en la tierra, y que jamás te importe nada como me encuentre yo. Eres realmente odiosa y fastidiosa, y ojala que encuentres a alguien que sea igual que tú y os soportéis muta mente, mucha suerte con eso, porque nadie te soporta.- Tras esto colgué.
No puedo definir cuan libre me sentía, había logrado liberarme de unas de cadenas demasiado pesadas que me impedían seguir. Respiré profundo y sonreí con los ojos cerrados a la nada, me sentía realmente bien.
----
Y hasta aquí la primera parte del segundo capitulo, espero que os guste.



Comentarios
spidrmancoy - hace más de 9 años
Que buena lección: hay que echar a la gente tóxica, que no te aporta nada sino al contrario, de tu vida. Me ha llegado un montón, me he introducido en la historia y he sentido también ese dolor. ¡Te estás superando!
missdreaming - hace más de 9 años
Independientemente de que haya sido una buenísima elección, porfaa sige que me ha encantado. :)
missdreaming - hace más de 9 años
Y estoy de acuerdo con spidrmancoy, te estás superando, y mola mucho. Sigue así. :)
darkosen_ - hace más de 8 años
Muchas gracias, a los dos por el apoyo y por prestar parte de vuestro tiempo leyendo este relato. Muchas gracias.
darkosen_ - hace más de 8 años
Muchas gracias, a los dos por el apoyo y por prestar parte de vuestro tiempo leyendo este relato. Muchas gracias.
cangrejita8 - hace más de 8 años
Este capítulo me ha parecido que Sonia no es muy buena amiga,es una amiga estúpida y que solo se interesa por ella le da igual la amiga. Si yo fuera Sonia me preocuparía mas en sus cosas antes que de reirse de la amiga que bastante tiene ella ya. Y yo haría la dieta i delgazaría por tal de callarle la boca.
No se pueden incorporar más comentarios a este blog.