Cibercorresponsales

Recuerdos de universitaria

Publicado por goldencurls el 05/11/2015

-Cuando desperté el dinosaurio todavía estaba allí.

-Abuela, no entiendo. ¿Qué pasó antes?

-Lo siento Adrián. Empezaré desde el principio.

Tenía veinte años, y estaba estudiando mi segundo año de carrera en medicina.Había un chico hermoso, de una belleza de otro planeta, al que llamaban "el dinosaurio". Todavía no entendía el por qué de ese apodo, pero pronto lo descubriría.

Tenía el pelo corto, rizado y algo alocado. Sus ojos eran únicos en la faz de la tierra, eran verde esmeralda, algo que nunca había visto nadie. Tenía el poder de atravesarte con la mirada. Era esbelto y un poco musculoso. Un chico bastante alto. Jugaba en el equipo de baloncesto de la universidad y todas las chicas estaban enamoradas de él, pero yo no tenía tiempo para pensar en chicos. Debía estudiar mucho, así que no quería perder el tiempo pensando en tonterías como el amor...

-Abuela, la descripción del chico me es famili...

-Shh, calla Adrián y escucha la historia hasta el final. ¿Por dónde iba? Ah, ya lo sé.

Pasó el tiempo y el año se acabó. Para celebrar las buenas calificaciones unos amigos nos pusimos de acuerdo para ir a una fiesta. La verdad es que yo no estaba muy segura de querer ir. Era la típica chica que no salía apenas, estudiaba todo el día refería los libros a los amigos. Aún así mi mejor amigo Marcos acabó por convencerme y fui.

La fiesta estaba siendo muy aburrida para mí. Jamás había estado en un sitio así y  se  acercó Mario ,"el dinosaurio" para preguntarme que tal había ido el curso.

Se dio cuenta de que no me sentía a gusto en ese sitio. Me agarró de la mano y tiró de mi hasta llegar a un Audi R8, su coche. Me llevó al punto más alto de la ciudad, ¡era preciosa desde allí arriba ! Hablamos varias horas e inesperadamente me besó bajo la luz de la luna y las estrellas. Me ruboricé, mis mejillas estaban ardiendo a causa de la vergüenza. Nunca había experimentado algo parecido.

Seguidamente , fuimos a su casa y nada más entrar me di cuenta del porqué de ese apodo. Su habitación estaba llena de maquetas y cuadros de dinosaurios.

A partir de ese día empezamos una relación de noviazgo.

Pasaron los años y acabamos nuestro último año de medicina.

Al terminar fuimos todos a un banquete y más tarde a un establecimiento que habíamos alquilado. Me empezó a doler la cabeza a causa del volumen de la música y decidí marcharme a casa. Además la gente empezaba a tomar mucho alcohol, entre ellos Lucas, mi compañero de clase,pero parecía que ya se iba el también a casa.

Cogí el coche y empecé a conducir.

Sangre, había sangre en todo mi cuerpo! En la cara, los brazos, la pierna... Vi la cara de Mario y al cabo de unos segundos me desmayé.

Caí en coma y al cabo de mes y medio ,cuando me desperté el dinosaurio todavía estaba allí.Lucas había ingerido demasiado alcohol y se chocó conmigo cuando me disponía a tomar una rotonda. A pesar de todo Mario permaneció a mi lado en el hospital.

-Esta es la historia de como me hice esta cicatriz y además  cómo conocí al amor de mi vida, el amor verdadero. Tu abuelo.

(Esta es la redacción de la que hablaba en mi anterior post. P.D. Teníamos que usar el microrrelato de "cuando desperté el dinosaurio todavía estaba allí" en la redacción)