(Sin titulo)
El verdadero impostor
por Rinda Shieldore Stargal de la aldea oculta de la hoja
Cuando salí a la brillante luz del sol con mi kunai desde la oscuridad de mi casa, tenía solo dos cosas en la cabeza: Cómo es que fui tan ciega y el por qué de que siempre estoy con hambre.
Pero mira que soy cabezota, todavía no me conoceis asi que me presento, mejor tarde que nunca.¡Hola!, soy Nat y voy a contaros la historia de como me fue en mi primera misión como agente secreto de la aldea oculta de la hoja.
Todo empezó justo 3 meses, dos semanas y 1 día después de empezar la escuela secundaria. Ese día en la clase de tutoría nos dieron sobre que contenía toda la información sobre la misión que tenía que hacer cada uno. Me encargaron llevar un pergamino al Kage supremo, el Kage de los Kages, o eso debía aparentar.
Cuando estaba a punto de partir hacia la sede donde se encontraba nuestro rey, me dijeron que yo no haría sola la misión sino que estaría acompañada de otros 5 integrantes de aldeas vecinas que también tenian que entregar sus respectivos pergaminos, todo ellos de mi misma edad, concretamente de Axel de la aldea oculta de la niebla, Nil de la aldea oculta de la arena, Slydra de la del sonido, Karen de la aldea oculta de la luna y Tsuki de la aldea oculta de la cascada.
Cuanto más conocía a mis compañeros de misión, se me hacía más amena y divertida la aventura, pero nunca me imagine lo que pasaría al cabo de un tiempo...
Un día, justo cuando cantábamos la canción del cocodrilo, Karen se dio cuenta de que habíamos estado caminando en círculos durante mucho tiempo y enseguida todos miramos a Slydra ya que era ella la que nos guiaba. Ella puso cara de no haber roto un plato y dijo que no sabía lo que pasaba ya que ,según ella, había estado siguiendo las instrucciones al pie de la letra.
Si os digo la verdad, la aldea oculta del sonido no parecía muy confiable y nunca encajo con las demás aldea asique en ese momento creo los 6 pensamos en lo mismo pero ninguno se atrevió a hablar. Después de un silencio incomodo, Tsuki dijo que no pasaba nada y que todo el mundo comete errores y que a partir de ese momento ella llevaría el mapa. Ojalá nunca hubiese dejado que Tsuki cogiera el mapa, todo habría sido como tuvo que ser.
Desde que Tsuki cogió el mapa, las cosas fueron de mal en peor… Primero, acabamos en lo alto de la un acantilado y tuvimos que darnos la vuelta, era eso o tiraros por el precipicio opción que no nos daba muchas esperanzas. Después nos quedamos inmovilizados por haber estado pisando terreno de arena movediza, que ¿cómo salimos?, no fue fácil pero Nil que provenía de la aldea oculta de la arena nos sacó utilizando uno de sus jutsus (jutsu=técnica ninja).Finalmente nuestro último desastre fue uno que me hizo enojar, pero me enoje de verdad. Quedamos atrapados en un laberinto del cual tardamos nada más que 10 días en salir, genial reducimos las reservas de comida y perdimos el pergamino de la aldea del sonido allí, pero no volvimos ni aunque nos pagaran sobretodo Axel, que fue mordido por una serpiente durante el intento de salir de aquel dichoso laberinto.
Cuando logramos salir del laberinto, nos esperaba un chico llamado Marc que provenía de la aldea oculta de la roca. Nos dijo que habían alertado a las aldeas que la aldea del sonido había mandado a una impostora, que tenía la misión de cambiar los pergaminos por otros falsos que contenía la suficiente información como para causar una guerra entre las aldeas si llegaba a las manos del rey.
La verdad que tal noticia nos enfadó muchísimo, tanto que ni siquiera le dimos opción de hablar a Sydra ya que siempre tuvimos sospechas de la aldea del sonido y en una pelea de 6 contra 1, acabamos con su vida liderados por la rabia. 13, 13 años tenía yo la primera vez que me manché las manos de sangre.
Marc se unió al grupo para cubrir la baja y tomó el liderazgo, nadie se quejó ya que de no ser por el todo se habría derrumbado o al menos eso nos hizo creer.
Con Marc al mando pasamos divertidos momentos, como aquella vez que nos despertó a plena madrugada con sus pesadillas de que casi se le come un oso, y también no hubo más bosques frondosos, animales salvajes en medio del camino o cosas que nos hiciera perder tiempo.
Un día, nos topamos con unos villanos que eran antiguos ninjas de sus respectivas aldeas pero que se habían ido al mal camino en busca de poder. Tuvimos mucho miedo ya que ellos eran unos jounin (ninjas de alto nivel) pero gracias a la ayuda de Marc, como no, salieron corriendo como niños pequeños.
Faltaba muy poco para que llegásemos al templo donde se encontraba el rey cuando a nil le preguntó a Marc, como había adquirido tanta habilidad siendo de la misma edad que nosotros. Y es que era muy buena pregunta y estuvimos esperando a que Marc respondiese, y bueno pues no respondió y eso hizo que le hiciéramos unas cuantas preguntas una detrás de otra hasta que este se hartó. Lo que hizo a continuación nos dejó sin saber reaccionar.
En dos segundos mató a Nil y dijo que si hiciésemos lo el pedia todos acabaríamos como él. En ese momento me di cuenta de que él era el verdadero impostor y que habíamos matado a una inocente joven. Esa noche llore, llore como nunca antes lo había hecho, preguntándome a mí misma el porqué de la penosa situación en la que estabamos metidos, ¿porque esto me tenía que pasar a mi, en mi primera misión? ¿por qué?, no hay derecho, no me lo merezco.
Pero no era tiempo de arrepentirse, teníamos que encontrar alguna manera de volcar el asunto, esta era más que una simple misión.
Era el momento de aplicar todo lo aprendido en primaria y demostrar que seré capaz de hacer mi sueño realidad, que es convertirme en hokage algún día. Y entonces tome cartas sobre el asunto cogí fuerzas y le proponi a Marc batirnos en un duelo, si ganaba él estaríamos a sus órdenes, pero si ganaba yo nos dejaría libres y la aldea de la roca sería extinguida.
Y la batalla comenzó.
Las posibilidades de que yo ganase el duelo eran de menos cuarenta pero no iba a darme por vencida yo sabía que si confiaba en mí misma todo podría pasar.
Marc dio el primer golpe con su jutsu de ataúd de rocas, este ataque me dejo inmovil durante unos interminables y dolorosos segundos pero no iba a caer tan fácil. Lanze mi jutsu de multiclones de sombras e hice la uzumaki rafaga al estilo Nat. No le hice mucho daño pero al menos lo debilité un poco. Mi contrincante tardó unos pocos segundos en recuperarse y preparar su siguiente jugada, que fue lanzarme decenas de kunais muy rápidamente, de los cuales uno me dio en el hombro derecho.




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