Cibercorresponsales

Diario de uno más

Publicado por exactamente el 01/09/2014 · Categorías: Creación

"Por fin, después de tanto tiempo, su cara se le iluminó"...Un ligero movimiento de cabeza al agacharse a recoger su lápiz, una mirada hacía su espalda que a pesar de ser tan pequeña transmitía tanta confianza. Tonterías , un mero sentimiento confuso que se desvanece con un pestañeo, siempre está en la nubes, esas infinitas historias dignas de una serie de anime siempre con el mismo desenlace: acabar destacando entre su pequeña sociedad contemporánea. Su vida destacaba pero solo por ser tan monótona y tranquila como las demás , nada iba más allá de sus meras obligaciones diarias, un grupo de 3 conocidos, nada más del otro mundo, el único motivo por el cual se levantaba de la cama , saliendo de esa prisión tan cómoda a la que inocentemente llamaba "hogar".Los días pasaban , las semanas también , hacía demasiado tiempo que ya no sabía por donde empezar al mirar ese calendario lleno de polvo como si fuera un tesoro abandonado. Era aburrido , si, pero nadie se podía quejar de ello, al fin y al cabo, los daños eran también un mero cuento de hadas que ignoraba por completo, eso le dibujaba débilmente una extraña sonrisa de conformación.

Una noche lluviosa, como no, nada mejor para estrenar esa chaqueta verde grisácea, los gustos de sus padres para la moda eran pésimos aunque los suyos tampoco se alejaban mucho, odiaba llamar la atención, demasiado agotador, por lo cual , su vestimenta era perfecta. Corrió hacía la entrada de un supermercado, el nombre es muy borroso, al fin y al cabo, es lo último en lo uno se fija cuando tu preocupación es otra. Las nubes grisáceas se fusionaron con el oscuro cielo, era hasta gracioso, parecía que ese negro tan pesado había estado ahí desde siempre, nada más cautivador y simple atraía su mirada tan en silencio. Aunque nada que no se pueda disipar con el ruido de las puertas mecánicas abriéndose a la vez, esa cara, ese olor tan vago pero tan familiar...ya eran 10 años en la misma clase, que casualidad más adorable. "¿Tu también eh?" nada más natural que esas palabras que salían por sus labios acompañadas con una divertida sonrisa, a pesar de todo, su nombre estaba tan poco pronunciado pero a la vez tan imponente en sus recuerdos como un pilar fortalecido por cada año que pasaba , observando sus logros. "Si" una tímida respuesta con los ojos apenas abiertos y con una perezosa sonrisa con el motivo de devolvérsela. El silencio se vuelve a poner a pesar del tremendo ruido de las gotas el impactar sobre la superficie, nada más duradero que unos míseros 15 minutos. Se disponen a salir, sus caminos de vuelta se convierten en uno mismo, al fin y al cabo, sus calles estuvieron siempre pegadas desde cuando le alcanza la memoria.

Un nuevo silencio, una acera iluminada por unas escasas farolas que cumplen su trabajo perezosamente, donde parece que el único que la vuelve a la vida son dos parejas de pisadas formando un pequeño eco. De repente su voz alegre parece que está volviendo a entonar una frase , "Oye, ¿te acuerdas cuando éramos pequeños?". Una charla empieza, cubriendo levemente el ruido de su marcha, una risa sobresaliendo pero que se apaga rápidamente por un "Este era tu portal ¿verdad?". Su presencia desaparece al doblar la esquina pero su preocupación ahora es otra, nada especial, solo una leve opresión en el pecho, ¿será que se ha cansado sin darse cuenta?