EL VALOR DE LA VIDA
Me gustaría hacer una reflexión sobre el valor de la vida, que es algo en los que muchos no pensamos pero en algún momento de la vida tendremos que hacerlo ante una pérdida, una caída o un "chocón".
Como dicen los refranes populares: “A vivir la vida, que son dos días”.
Esto lo aplicaría a la vida de todos y cada uno de los habitantes de este mundo. Todos somos iguales, hemos nacido con la misma razón y a salvo del sexo, podemos hacer la mayoría de cosas iguales.
El valor de la vida, nadie lo conoce, hasta que no te encuentras en una situación de vida o muerte. Nuestra vida, desde siempre, ha sido muy acelerada y ha ido a un ritmo de maratón. El colegio, la compra, la comida o el trabajo, hacen que a uno no le dé tiempo de reflexionar sobre su propia vida.
Aunque no soy psicólogo, como he comentado previamente, creo que el mejor psicólogo de tu propia vida, eres tú.
A veces, cuando pienso en las cosas que de verdad me hacen feliz, llego a la conclusión de que en la vida no me hace falta nada material, sólo me hace falta el amor de mis familiares, salud y algo de dinerillo para terminar el fin de mes.
Seré muy directo, y no hablaré de utopía, porque creo que frases como esta: “Ojalá se acabase el hambre en el mundo”, son frases hipócritas, que llevan un mensaje muy bonito pero que nunca sucederá.
Quiero comentar que la solidaridad ha estado presente conmigo desde bien pequeño. Una de mis tías, desde hace algo más de una década ha sido cooperante en los campamentos de refugiados saharauis y siempre, a todos los sobrinos nos ha guiado en ese camino.
Mis padres también siempre han echado una mano en esta asociación de ayuda al pueblo saharaui, uno de los pueblos más desfavorecidos que existen.
Por eso, me he criado de la mano de la solidaridad, pero sí que es verdad que por malo o bueno que sea, uno reflexiona sobre muchas cosas.
Uno de mis pensamientos, hacia este tema, es el de que ayudar está muy bien y engrandece en muchos casos a la persona que tiende una mano al que la pide, pero yo diría que la pobreza no se va acabar nunca, mientras siguen existiendo las clases sociales.
Las clases sociales, existen, están ahí y además, aunque no lo creamos, en una de las cosas más importantes en nuestra sociedad para muchos, por eso digo que está muy bien ayudar pero mientras los ricos sigan siendo ricos, la clase media siga siendo media y la clase baja siga siendo clase baja, su nombre mismo lo dice, pues aquí no habrá nada que hacer.
Algunos me diréis que el valor de la vida es ser feliz. Y tan claro, que es ser feliz, pero yo te invito a que te adentres en esta palabra de cinco letras.
La felicidad no te viene de golpe, en la mayoría de los casos, ni la felicidad llueve, es decir no la puedes recoger con un cubo, por ejemplo.
Para encontrarte con la felicidad, no debes buscarla. Debes ser tú mismo. Tienes que hacer las cosas que tu corazón o tu propia conciencia te dicte.
Si deseas ayudar, comienza a ayudar al que más te necesita. Si deseas rezar, empieza a rezar y así con todo lo que te plantees.
En ese momento llegarás a ser feliz, con todas las letras. No te dejes llevar por la corriente popular, ni por el qué dirán, haz lo que quieras y con lo que creas que vas a ser realmente feliz




Comentarios
partysummer - hace más de 9 años
Gran texto @mario, felicidades y gracias por hacerme pensar. Si pones una foto, te pongo en portada!!
meibiparty - hace más de 9 años
Muy interesante, muy reflexivo...incita tanto a darle vueltas a las cosas... Y una vez que consigas alcanzar tus 5 letras, ¿cuál será tu causa? ¿te unes en el apoyo al pueblo saharaui? Me parece una iniciativa maravillosa la de tu familia...y si tu tía ha ido, te recomiendo ir. Yo estuve y parte de esa lucha está en compartir con ese pueblo (siempre que puedas, claro,...y te ahorres para el billete, que no nos lo ponen fácil) Salam
mario - hace más de 9 años
@partysummer ya está subida la foto, que he estado con exámenes y hasta hoy no he podido subirla... ;)
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