VIOLENCIA EN EL FÚTBOL

GREEN STREET HOLLIGANS
Mi nombre Samuel Peterson. Mi droga, la violencia; Mi locura, el fútbol. Mi familia, "la SG"; Mi vida, el West Ham United, y esta mi historia:
Estudiaba Periodismo en la Universidad de Harvard, pero un escándalo relacionado con drogas me costó la expulsión. Sabía que no podría seguir viviendo en los Estados Unidos, por lo que me mudé a casa de mi hermana Susan, que vivía en Inglaterra con su marido Tom y mi sobrino Kevin.
Nada más llegar a casa de Susan me encontré con Peech,cuñado de Susan, y me invitó a ver el partido West Ham – Chelsea. En aquella ocasión, ganamos 1-0 y hubo una trifulca entre el grupo radical del West Ham "la SG" y los radicales del Chelsea.
Yo, en América, jamás me metí en peleas, pero eso era Inglaterra y no Boston. Al primer golpe vi la gran descarga de adrenalina. Me encantó ese subidón que da ver tu mano ensangrentada de sangre de un rival. A partir de ese momento, me gané una nueva vida y mi nombre paso a ser el “Yanqui”.
Pasaron las semanas y todos los aficionados del West Ham esperábamos el sorteo de la Copa. El resultado fue de lo mejor: nos tocaba en primera ronda jugar contra el Middlebrown, nuestro rival a muerte.
Y no solo en el terreno de juego, también entre las hinchadas. Y más desde que Michael Johnson, líder de los ultras del Middelbrown, perdiera a su hijo en una pelea contra "la SG".
El día del partido ,cuando íbamos hacia el estadio, nos enteramos que Michael secuestró a nuestro amigo Peech. "La SG" salió en tromba. Nos dirigimos al descampado donde estaban los ultras del Middelbrown.
Y todo se volvió confuso: piedras volando, gritos, confusión, angustia... miraras donde miraras encontrabas sangre dolor y lágrimas, fuego , ira y puñetazos por doquier. Volví a saborear la droga de la violencia y el éxtasis del dolor , que desaparecieron de golpe, en cuanto vi el cuerpo muerto de mi amigo Peech, ensangrentado y roto por la violencia de Michael. Cuando la policía llegó al lugar de los hechos, todos habíamos desaparecido y volvió a reinar el silencio que rodeaba el cadáver de mi amigo Peech.
Después del informe policial, enterramos a Peech como él siempre quiso: bajo el mural del West Ham. Para nuestra sorpresa, Michael Johnson y los ultras del Middelbrown asistieron. Y lloraron amargamente la muerte del más loco apasionado del fútbol.
Desde aquel momento "la SG" y los radicales del Middlebrown, sellaron la paz, se hermanaron y, lo más importante: SE PERDONARON PARA SIEMPRE Y JURARON NO VOLVER A USAR LA VIOLENCIA EN EL MUNDO DEL FÚTBOL . Y Peech Mackenci fue ídolo y referente para las dos hinchadas.
Mi nombre Samuel Peterson, mi locura, el fútbol; mi familia, "la SG", mi droga, la violencia y mi curación de una vida tan deshumana, el PERDÓN.



Comentarios
partysummer - hace más de 11 años
Es la historia real o es una ficción? Me da pena que se use el fútbol como excusa para la violencia.
partyflipa - hace más de 11 años
¡Qué bien escrita! Me gusta un montón la historia. ¿Cómo se te ha ocurrido?
alumnos sección - hace más de 11 años
Yo pienso igual que tú que por las drogas al final acabas muy mal. Yo tengo un amigo que por seguir con las drogas al final acabo demasiado mal hay otras cosas mejores que drogarse escuchar música hacer bix-box y eso es divertirse no hay que divertirse solo con las drogas se puede divertir con muchas cosas más.
nola12jimenez - hace más de 11 años
es ficción pero con parte de verdad. Se me ocurrio viendo una pelicula gracias por comentar
No se pueden incorporar más comentarios a este blog.