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La chica de las hachas, capítulo 15

Publicado por rocio_dreamcatcher el 21/12/2013 · Categorías: Creación, Libros, mi novela, LJDH, mi mundo, personalidades, idolos, las personas, me llamo clove, La chica de las hachas, capítulo importante!, sarcasmo everywhere, impactante, Escribir

Capítulo 15: al capitolio solo le gusta tu arte cuando estás en las pruebas de los vigilantes.

En mi sueño, regreso a casa. No he ganado los Juegos, sino más bien nunca han existido. Entonces Fellow aparece por la puerta y me mira. Es él, pero su expresión es extraña. Sus ojos no son verdes, sino negros. Entra. Intento impedirlo, pero no puedo moverme de donde estoy. Grito, pero nadie me oye. Fellow se adelanta y trae a mis hermanos.”Elige” me dice “y despídete de los otros dos”.

Me despierto sobresaltada. Samantha me está llamando, dice que me toca hacer la guardia. Mi incorporo, veo que tiene los ojos hinchados. No la pregunto por qué, no es asunto mío.

Miro al cielo. Es totalmente artificial. Tengo muchísimo frío, y no puedo hacer nada para remediarlo excepto tiritar. Recuerdo las noches frías del distrito, cuando un grupo de vecinos salíamos y encendíamos un fuego. “Son idiotas” pensaba. Ahora ya no estoy tan segura. Pienso en todo lo sucedido hoy. Muertes, decepción, engaños… y ahora mi único sentimiento es la ira. Sabía que los Juego iban a ser horribles, pero…

Pienso en mi cumpleaños. Parece que han pasado millones de años, y ha sido hace menos de un mes. Y lo peor, los Juegos me están cambiando. Tengo que mostrar algo de mi verdadero ser al capitolio, ¿pero qué?

Una estupenda idea se me viene a la cabeza.

Me alejo un poco, y llego a un claro. Todo está cubierto de nieve. Con un cuchillo de Samantha, me pongo a trazar enormes letras, para que todos puedan verlo. Un poco después, he escrito: “NOT WITH THE CAPITOL” y una enorme mano con los tres dedos centrales levantados. Ya me puedo imaginar la sorpresa que se van a llevar.

Está amaneciendo, de modo que vuelvo, dispuesta a despertar a los demás. Justo en ese momento empieza a sonar un ruido. Es mucho más fuerte que el de los pájaros asesinos, no digamos ya que los paracaídas. Se me ocurre mirar hacia atrás, una mole de nieve se acerca a gran velocidad. Una palabra casi obsoleta para mí se me viene a la cabeza: avalancha.

- ¡Levantaos!- grito a Samantha y a Josh- ¡Que viene una avalancha! Se levantan y empezamos a correr. Solo llevamos lo puesto, los sacos, apenas armas y nada de comida. Y también hemos perdido la manta.

Pero todo eso da igual ahora. Tenemos que correr muy rápido, y no es fácil teniendo que esquivar árboles, pierdas y ramas. Vemos una figura humana a lo lejos. Corremos hacia ella. Necesitamos acercarnos para ver que está atrapada, y que grita pidiendo ayuda.

- Creo que es la chica del 12- dice Josh.

Vamos a acercarnos cuando un árbol se cae. Nos apartamos rápidamente, pero ella no tiene tanta suerte. El árbol la aplasta. Solo veo su rostro un segundo: totalmente demacrado, con los brazos y las piernas en una posición que demuestra que están rotos. Josh me pone una mano en el hombro, suena el cañonazo, y seguimos corriendo.

Poco después la avalancha para. Nos sentamos en el suelo, terriblemente cansados.

- Lo hemos perdido todo,- susurra Samantha- todo…

Un horrible pensamiento se me viene a la cabeza. ¿Habrá sido mi mensaje al capitolio lo que ha producido la avalancha? No es imposible. Entonces empiezo a entender las palabras de Finnick; al capitolio no le gusta que le desafíen. No hacen excepciones con nadie. Siento tal impotencia e inferioridad que me dan ganas de llorar y gritar como una loca. Pero no, no les daré esa satisfacción.

Unos minutos más tarde llega un paracaídas con comida. No es mucha, pero se agradece. Supongo que será de Finnick, pero cuando sacamos toda la comida veo una nota de Blanca.

“Siento mucho no haber podido enviarte nada más. También siento haber confiado en Fellow, y casi obligarte a hacerlo. Pero, para bien o para mal, ya tienes patrocinadores. No te vengas abajo, puedes ganar. Confiamos en ti, tu distrito confía en ti.

Blanca.”

Sonrío. Por una razón o por otra, ya tengo patrocinadores. Eso compensa lo anterior, pero, ¿por qué habrá dicho “para bien o para mal”? Decido no pensar en ello.

Comemos un poco, no podemos gastar todo. Por suerte hemos cogido los sacos, decidimos usarlos también para guardar la comida. Tenemos que buscar un nuevo refugio, pero eso puede esperar, porque oímos gritos lejanos.

- Vayamos a ver qué pasa- sugiere Josh.

Llegamos a un pequeño claro, donde se encuentran Ashley y el del 3. Están a punto de luchar.

- ¡Dime dónde has escondido nuestras armas!- grita la primera.

- ¡Te he dicho que yo no las he cogido!

Nos miramos los unos a los otros.

- Esperadme aquí- nos susurra Samantha.

Josh y yo nos quedamos mirando. Ashley se abalanza sobre él, pero este la esquiva. Ella esquiva la piedra que él la tira, y le lanza y cuchillo. Y así acaba la pelea, porque le da de lleno.

Ashley se dispone a buscar sus armas cuando oye una voz.

- Un paso más y te mato- dice Samantha. ¿Samantha?

- ¿Qué tal la tarta?- contesta Ashley- ¿Os gustó?

- Oh, estaba deliciosa- ironiza Samantha. Miro a Josh, está tan sorprendido como yo.

Entonces Samantha dice algo así como “Así es como se tira un cuchillo” y atraviesa a Ashley.

Dos cañonazos suenan simultáneamente.