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¿Y a ti quién te manda, Effie? Capítulo 3

Publicado por corcheita44 el 04/03/2014 · Categorías: Curiosidades, Humor, Pensamientos, Creación, Libros, LJDH, Diversión a lo grande, Cosas que me gustan, Cuentos, Historias, Effie Trinket, Novelas, ¿Y a ti quién te manda, Effie?

CAPÍTULO 3: La suerte no está de mi parte

Los tres salen de las habitaciones indignados. Haymitch viste un traje turquesa con una corbata púrpura, una camisa amarilla y unos zapatos verdes. Sé con solo mirarle que está ideando una forma para matarme, pero solo puedo sonreír. Peeta va más normal, al menos para mí. Lleva una sudadera roja llena de bordados, lo que la hace muy ancha, unos pantalones ajustados negros y unas zapatillas grises. Katniss es... la más parecida a una mujer del capitolio. Lleva un vestido muy cortito y aparatoso de tonos morados y rosas, con flecos y con manga larga, pero sin hombros. Unos zapatos -con poco tacón, que se nos mata por la calle- morados. Parece un pompón. Ya solo falta teñirles el pelo y maquillarles. ¡Qué emoción!

-Lo odio -dice Katniss con una cara inexpresiva.

-¿¡Cómo nos has podido hacer esto!? -dice Peeta decepcionado.

-Cuando salgáis a la calle me lo agradeceréis -replico.

Lo que me parece extraño es que Haymitch no se queje. Cuando le miro de reojo para vigilarle veo que sigue con la misma cara y no aparta los ojos de los míos. Me limito a no prestarle atención y cojo a Katniss para maquillarla y teñirla el pelo. A pesar de que forcejea un poco, le termino convenciendo de que es por su bien y deja de resistirse.

-Vale -suspiro. -A ti te dejo elegir el tinte. ¿Cómo lo quieres?

-Marrón -responde seria.

-Katniss... -digo cansada.

-¡No me quiero teñir el pelo!

-¡Te aguantas! ¡Recuerda que os podría entregar perfectamente y denunciaros por haberos colado en mi casa! -le dejo sin comentarios y cojo el tinte rosa que tengo delante.

-¿Enserio?

-Enserio -respondo.

Al cabo de media hora consigo preparar un peinado aparatoso, pero que no llamará la ateción. Le maquillo con sombra de ojos y pintalabios rosa y me pongo manos a la obra con los chicos. A Peeta se lo tiño de rojo y le dejo el pelo despeinado. Parece que no le desagrada mucho. Le maquillo también un poco y termino enseguida. Lo peor llega cuando le toca a Haymitch.

-¡No seas crío! ¡Vamos!

-A mí no me vas a pintar el pelo con eso.

-¡¡Haymitch!! -chillo. Estoy de los nervios.

Katniss y Peeta se alían conmigo y juntos conseguimos mantenerle quieto. Para fastidiarle, le tiño el pelo de verde pistacho.

-Tus pelos son residuos tóxicos y radiactivos -dice Katniss con una sonrisa de oreja a oreja. -Seguro que brillan en la oscuridad.

-¡Muy graciosa, niña! -responde.

Al rato estamos listos para salir. Bajamos a la calle, está llena de gente porque acaban de comenzar las rebajas y, gracias a eso, nos es fácil perdernos entre la multitud. De vez en cuando me aseguro de que me sigan y no se pierdan y al final llegamos a la estación de trenes. Pero para nuestra sorpresa, hay agentes pidiendo la identificación a la gente que quiere subir al tren. Me pongo a pensar y veo que en una de las salidas está Albert. Cojo a Peeta de la mano y él agarra a los demás para que no se pierdan y vamos hasta allí.

-¡Hola, Albert!

-¡Oh! ¡Hola preciosa! Estás muy guapa.

-Gracias... Eh... Oye... ¿qué haces aquí? -disimuladamente me voy girando para que él de la espalda a la puerta de la estación y Peeta, Haymitch y Katniss consiguen colarse.

-Pues nada. Revisando que los fugitivos no escapen -dice mientras se aproxima despacio hacia mí.

-Ah... -cuando decido que la distancia entre nosotros ya es más que suficiente le corto enseguida. -¡Uy! ¡Que se me va el tren! -y corro hacia la estación.

-¿¡Dónde vas!? -me pregunta mientras me alejo.

-Al Distrito 1 -digo el primero que se me ocurre. -Tranquilo no será mucho -y subo corriendo al tren.

¿Por qué narices me he subido al tren? Con tal de que Albert no me siga estoy tranquila. Busco a Katniss y a los demás y veo que están sentados uno en cada sitio, bastante alejados entre sí. En estos trenes se está muy mal de pie y todos toman asiento. Supongo que se habrán sentado también para disimular. Veo que el hombre que estaba al lado de Haymitch se baja del tren y voy a sentarme.

-¿Qué haces aquí? -pregunta extrañado.

-No podía ir a la estación y después irme como si fuese allí para no hacer nada. Además necesitaba encontrar con urgencia una vía rápida de escape.

-Ya... -dice con una sonrisita.

Al lado de Peeta se sienta una mujer muy... ancha, y no solo por el vestido, lo que hace que Peeta se quede aplastado contra el cristal de la ventana. Va a ir muy incómodo. Katniss está sentada frente a un hombre de unos treinta y cinco años. Rubio, con la cara muy fina, nariz puntiaguda y unos peculiares morritos. Lleva un sombrero de paja con una flor rosa pegada con cinta adhesiva. Le doy un codazo a Haymitch para que mire hacia donde yo.

-¿Y a ese de dónde le han sacado? -le pregunto.

Él comienza a reír y entonces el tren se pone en marcha.

Una señora nos reparte unas guías turísticas, el hombre que tengo atrás habla con su esposa y sus hijos sobre lo bien que se lo van a pasar y lo mucho que les va a gustar. Una niña lleva una cámara de fotos, una chica le agradece a su novio el haberla traído... Una voz dice: "Nuestra primera parada será el Distrito 1, allí estaremos un par de días y seguiremos hasta el 2. Abróchense los cinturones y que tengan un buen viaje. Gracias".  Y entonces me doy cuenta de algo. Estamos en un trenecito turístico.