En cada instante.

Siempre he pensado en la importancia que tenían las cosas, y en la que nosotros le dábamos. Siempre he pensado en la importancia que podía tener un acto, por mínimo que sea. Pero creo que ha sido hace poco cuando de verdad me he dado cuenta de que hagamos lo que hagamos cuenta, desde la decisión más trascendental de nuestra vida hasta la mayor nimiedad que podamos imaginar.
Y es que no nos damos cuenta de lo que hacemos la mayoría de las veces. No nos damos cuenta de que cada paso que damos estamos un paso más cerca de nuestra meta, que aún no conocemos, y quizá nunca lo hagamos. Y no nos damos cuenta, casi nunca, de las miles de variables que manejamos en cada momento.
¿Qué vas a hacer dentro de un instante? Puede que decidas seguir leyendo esto, y tu vida cambie, o no aparentemente, pero ya habrás avanzado un paso, quizá mínimo. Puede que ya hayas parado de leer, o que pienses hacerlo al final de la oración, del párrafo... Y tu vida cambiará, quizá de forma imperceptible, puesto que no habrás llegado a estas conclusiones, o no sabrás que yo también he llegado a ellas o... quizá en un instante suene un petardo, o abran esa puerta que tienes detrás, o alguien ta llame por ese tuenti que tienes en esa pestaña, o un perro ladre o... qué se yo, y te sobresaltes, te gires, sonrías... no se sabe.
Y lo mejor de todo, es que nos damos cuenta de cómo hemos influido en alguien, o como alguien ha influido en nosotros, quizá diciendo "buenos días" en el momento oportuno, o quizá sonriendo, o... qué se yo.
Pero todo esto suena muy bonito y muy rosa, y... yo que se. Pero lo que quiero decir es que normalmente no hacemos las cosas pensando en lo que hacemos, sino por hacerlas. Pero no podemos pensar en cada momento lo que hacemos, y menos imaginarnos la repercusión que tendrá. Entonces, ¿a donde quiero llegar? Sencillo. Quiero que nos demos cuenta de que nada es por azar, ni por casualidad, sino por causalidad.
Las cosas pasan por algo, y no por eso somos menos libres. Y es esa inseguridad de lo que vas a hacer, y la seguridad de que va a tener repercusión, la que da esa sensación de estar vivo, de que cada instante sea distinto, de esperar con ansia que pase cada segundo para ver qué sucede, para que el mundo me vuelva a sorprender, para que me rete a encontrar el lado positivo de todo, para que me desafíe a seguir viviendo, riendo, llorando, y esperando a que llegue ese día en que aprenderé a ver las cosas de otra manera y descubrir que esto que ahora cuento está totalmente equivocado.
Hasta ese día, seguiré esperando todo lo que se me presente por delante, dando todo lo que puedo dar por (como alguien me dijo este verano) el simple hecho de saber que yo he puesto toda la carne en el asador, que he hecho todo lo que estaba en mi mano.
Imagen: Cajón Desastre


Comentarios
un tal carlos - hace más de 14 años
Me permito hacer un inciso en mi tutorial de HTML para publicar algo un poco más personal, un poco más yo... Una crítica a la vida, al pesimismo que a veces me abate y una de esas paranoias que tanto me gustan.
jose luis - hace más de 14 años
Estaba pensando... Que no sólo las decisiones que tomas de manera individual, hay decisiones que toman por ti que cambian tu vida de manera exponencial. Hace años cambiaron a mi padre de trabajo, le mandaron a un pueblo de guadalajara y mis padres fueron a mirar una casa allí, porque hacer 50Km de ida y de vuelta cada día no es calidad de vida. Inexplicablemente mis padres decidieron seguir viviendo en Madrid, yo pude continuar en el colegio, y en ese mismo colegio sigo trabajando cada día. Esa decisión marco mi vida??? Estoy seguro que si, mi vida sería totalmente distinta, es más estoy casi seguro de que sin esa decisión nunca estaría escribiendo ese comentario. Gracias por seguir escribiendo!!!
pulguilla - hace más de 13 años
me encanta como escribes y que sepas que me a hecho pensar. Sigue escribiendo así de bien que escribiendo así creo yo que llegaras a muchas personas.
No se pueden incorporar más comentarios a este blog.