Microrrelato: ¡Hasta luego, Churri!
Y de pronto se abrió la puerta. Era mi mujer. Venía del supermercado, según me había dicho. Yo estaba un poco cabreado. Siempre me decía lo mismo: <<voy al súper>>. Y yo creo que se traía algo entre manos. Un día me dijo lo mismo: <<voy al súper>>. Pero... ¡si era...






