Me encierra la soledad de esta noche.
La cavidad de una habitación llena de oscuridad, de otra galaxia.
Mientras, ahí fuera se desencadena una disputa, se enfrentan la vida y la muerte, donde el verdugo es un titeretero de personas.
¿Dónde está la luz que enciende a la gente? ¿Quién piensa hoy día por sí mismo? ¿Los adolescentes comidos por las redes sociales? ¿Los adultos que han sido comprados? Acaso... ¿los niños engañados por cuentos de princesas?
Cuando crees en Dios... ¿en qué crees que crees?
Vivimos en el siglo de Dónde quedaron las viejas costumbres. Siempre acomodados, y bien sentaditos, como nos han enseñado.
¿Quién es realmente capaz de dejar su telefono? O quién no conduce un coche, ni va al cine alguna vez...
¿Quién recuerda la última vez que fue a buscar a un amigo a su casa, sin saber si quiera si estaba? ¿Dónde se han quedado nuestras bicicletas? ¿Ver una peli...? ¡Id al teatro!
Y con todo esto, Vida perdió la guerra, y mi habitación sigue tan oscura como hace una eternidad.
Qué pasada. Yo intento resistirme a toda esa marea. Uso una bici, sigo jugando con 31 años... me encanta lo de "ir a casa de un amigo sin saber si está". Es algo que echo de menos... ¡las visitas!
Por eso es tan importante que, de vez en cuando, alguien nos haga recapacitar sobre lo banal de muchas de nuestras costumbres y sobre nuestra falta de compromiso con tantas y tantas causas justas.
Así pues, se agradecen tus post.
No se pueden incorporar más comentarios a este blog.
Comentarios
partyflipa - hace más de 11 años
Qué pasada. Yo intento resistirme a toda esa marea. Uso una bici, sigo jugando con 31 años... me encanta lo de "ir a casa de un amigo sin saber si está". Es algo que echo de menos... ¡las visitas!
socius - hace más de 11 años
Por eso es tan importante que, de vez en cuando, alguien nos haga recapacitar sobre lo banal de muchas de nuestras costumbres y sobre nuestra falta de compromiso con tantas y tantas causas justas. Así pues, se agradecen tus post.
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