¿Qué dice tu historia?
Cuando te preguntan por tu nombre, sueles responder de inmediato. Para la gente es una sola palabra. Para ti, es tu sello de identidad. Cada letra de esa palabra sale como si tuviera vida y decidiera que es el momento oportuno de salir. Demostrarle al resto del mundo que tienes un significado completo, a pesar de tener un nombre diferente.
Yo me llamo Almudena. Y podría dejarlo ahí. No sé bien que significa eso. Soy yo, Almudena.
Para algunos soy solo Almu, para otros que me conocen menos, deciden ponerme Denna. Mis padres suelen utilizar mi nombre completo, aunque saben que lo detesto.
Suele pasar con lo de los nombres o el sitio donde vives, quizá no te guste, pero puede que con el tiempo le encuentres un atractivo. Esas letras que te van a acompañar mucho tiempo durante tu vida, o esos edificios que ves a menudo para ir al instituto. ¿y qué es un nombre? No sabría responder del todo con certeza.
Ese nombre tiene un sentimiento marcado dependiendo de la persona a la que te refieras. Puedes decir tu nombre y según el gesto que ponga esa persona indica que las letras de tu identidad, implican dolor, alegria o pasión en ella. Pero que seas tú, cambia la cosa.
Podría decirse que ese es un buen comienzo para una historia. Que tal vez muchas empiecen así. Mi nombre es...Yo me llamo...O incluso soy...
Y al empezar a escribir darte cuenta que quizá eso que tanto significa para ti acabe no resultando lo mismo para el resto.
Y es entonces cuando te das cuenta de que no todas las historias empiezan con "Érase una vez" y no acaban con un "felices para siempre".
Cuando te das cuenta de que cada nombre, cada palabra y cada sentimiento metido dentro implica que rías, o que llores. Y que cuando lo vuelvas a leer tal vez vuelvas a hacerlo.
Que el prólogo no sea el primer comienzo, que el adiós resulte ser lo contrario a un punto y final. Porque eso es lo que te ayuda a aprender.
"Después de un tiempo aprenderás que el sol quema si te expones demasiado. Aprenderás incluso que las personas buenas podrían herirte alguna vez y necesitaras perdonarlas …Aprenderás que hablar puede aliviar los dolores del alma…descubrirás que lleva años construir confianza y apenas unos segundos destruirla" (William Shakespeare)
Una vez sentada a ver lo que debía escribir en mi diario supe que no era "tengo que fingir estar bien", sino estarlo porque puedo merecerlo. Ese "Estoy bien" que se dice sintiéndolo de verdad. Sin dudar ni un segundo.
Mirarme al espejo y preguntarme cual es mi nombre, cual es mi historia. Preguntarme quien soy. Me aceptaré, tendré miedo de mi, me querré y me odiaré al mismo tiempo pero nadie va a poder cambiar lo que vea.
Y podré contar mi historia por mi propio principio, sin dudar ni un momento de que lo estoy haciendo bien.
Escucha ¿qué dice tu historia?



Comentarios
rulparty - hace más de 8 años
Qué interesantes reflexiones con tan solo tomar de premisa "el nombre". ¿Crees que importante contar un identidad desde pequeño/a? ¿Es algo esencial para nuestro desarrollo personal?