Cibercorresponsales

Capítulo 33: El comienzo y el final

Publicado por _dennaselen el 13/04/2014 · Categorías: Creación, novela, los juegos del hambre, lo que me gusta, Enobaria

La mansión presidencial. La más importante de todo Panem. Todo con luces y está espectacular. Es precioso. Se supone que es por haber ganado los juegos pero los juegos no los gana nadie. Me pierdo observando la inmensidad del jardín cuando Joseph me lleva hacia el banquete:

- Vamos querida, toda la gente importante está aquí y quiere conocerte, te has vuelto famosa-dice

Lo dice como si fuera algo bueno. Ser famosa no es muy importante en mi vida pero ya todo ha cambiado, esta no es mi vida

- Que acogedor- dice Brutus que nos sigue por detrás observando la mansión, las luces y el banquete.

Me río. Es una de las pocas veces que dice algo que me hace reír. Me lleva hacia las mesas del banquete. Veo que Brutus lleva a Lyme a bailar. Me siento. No quiero ni verlo. Michael me ofrece bailar pero no quiero. Decidimos dar un paseo.

- Sé que con todo esto te acuerdas más de Dan que de cualquier otra cosa - me dice

- Bueno, a el estas cursiladas no le gustaban nada - le digo sonriendo

Estando a punto de llorar, sale el presidente Snow y todo el mundo aplaude. No se que tiene de importante, aparte de ser el presidente, no es nadie.

- Hoy todos estamos aquí para vitorear a la vencedora de los 62º juegos del hambre, ¡Enobaria Galpon!

Me apuntan con un foco y sonrío. Todos se asustan al ver mis dientes pero igualmente me aplauden como locos.

- Se espera de ella mucho en su distrito  ya que dentro de poco empezaran los 63º juegos del hambre y ella se convertirá en mentora. Aquí termina su gira y comienza su nuevo futuro. El orgullo hacia su victoria es incomparable. Seguro que nos seguirá guiando hasta que su vida se de por completada.

Fijo. Me ha dicho que seré la guía hasta que muera. Los fuegos artificiales comienzan y Snow brinda junto con el aire para darme la enhorabuena. Cuando todo acaba me llevan hacia el  tren, todos muy ilusionados. Todos excepto yo. Me pongo muy nerviosa y no se porque, la gira ha acabado y no tengo que visitar a más distritos ni sufrir las miradas asesinas de la gente furiosa que se encuentra en cada lugar de Panem. Supongo que sera por los próximos juegos. Seré mentora y no tengo ni idea de como se hace. Brutus y Lyme me ayudarán o eso espero. Cuando llegamos al distrito 2 todos me aplauden porque he llegado aunque no entiendo porque hay tanta gente. Decido ir por otro lado que no sea por el que vayan los demás y Michael me dice que me acompaña. Pasamos junto a la casa de Dan y se me cae una lágrima. Michael me abraza.

- Eh, tranquila, no te preocupes, se supone que Dan no le gustaba ver esa cara tan triste.

Sonrío, tiene razón. Cada vez que estaba triste Dan me consolaba. Le pido a Michael que se vaya hacia la Aldea de Vencedores porque tengo que hacer una cosa. Él acepta. Cuando ya se ha marchado me voy hacia el Hueso. Ahí hay un árbol. Es el árbol en el que Dan y yo nos conocimos.Lo sé porque a su lado pone: " Enobaria y Dan han estado aquí", que cursi. Me acerco y saco el medallón. Lo miro y lloro. Lo entierro junto a lo escrito. Me siento y miro hacia el cielo. Todo será diferente ahora, por eso quiero vivir el último minuto de mi vida real a la manera que a mi me gusta. Veo una figura a lo lejos. Es Thyron.

- Sabía que estabas aquí - me dice

- ¿ Y eso? - le pregunto

- Te vi como mirabas a Dan en la arena, nunca te he visto mirar así a nadie excepto a Anna.

Le miro y le sonrío. Solo miro así a las personas a las que quiero. Thyron se acurruca conmigo en el árbol.

- ¿Todo ha acabado ya? - me pregunta

- Si, o al menos por ahora - le digo

Ahora el distrito no tiene 2 vencedores. Tiene 3 supervivientes

FIN DE LA PRIMERA PARTE