Cibercorresponsales

Ya olvidaría mañana

Publicado por _dennaselen el 01/11/2017 · Categorías: Pensamientos, Creación

Sentía que cada parte de ella estaba muerta, completamente inerte, sin vida. Nada de vitalidad salia de ella, tan solo el leve suspiro de la exhalación y el latir de un corazón cansado, sin ganas de seguir. Caminar por una calle donde la lluvia dejaba leves inundaciones. Ella caminaba sin ganas, casi obligada por el frío y los impulsos de la noche. Su cabeza volvía a pensar en lo de siempre y nada estaba bien. Ella lo comprendía. Demasiada profunda la caída y ahora sin cuerda no podía salir del pozo en el que estaba encerrada. No sabia que mas hacer.

Dejando que cada paso la guiara por la calle en el crepúsculo, empezaba a contar cada segundo, evitando que la mixtificación de su cabeza permaneciera insistente, sin abandonarla ni un momento. Ella que quiso arriesgarse, ahora ya no está. Ese esfuerzo por avanzar, ese esfuerzo por tener algo que deseaba se ha marchado. Efímero, frío, distante, inexistente.

¿ Y ahora qué?

Era una ruleta rusa de la que costaba desprenderse, porque cuanto más lenta fuera, siempre había una mano que daba fuerza a que no se quedase quieta nunca. De eso trataba. De un intento vano de olvidar algo que había sido siempre un boomerang. No solo volvía con mas fuerza, sino que la tiraba al suelo y cada vez tenia menos ganas de levantarse. Cada vez que se giraba, sonreía, aceptando, mintiendo, fingiendo estar bien sin estarlo. Pero no entendía que la pasaba en realidad. No sabia como pasar por eso, no sabia cambiar de página. Y menos de libro.

Escuchaba cada consejo, cada palabra que la decían y que la daban esperanzas para ser fuerte pero ella lo intentaba. Y lo que los demás no entendían era que al final, el ser fuerte cansa, porque intentar ser fuerte por los demás, no solo hace daño sino que te hace mentir. ¿De que sirve decir que se está bien si luego se llora por las noches? ¿De que sirve mantener una cabeza alta si al final, todos se meten con todos?

Ella siguió caminando con su abrigo verde oscuro, su pelo castaño empapado por la lluvia y sus botas marrones. Sus ojos azules y sus mejillas pálidas por el frió. Siguió caminando. Pensando en el futuro, viviendo en el pasado.  No había farolas encendidas pero ella reconocíaesa calle. Le gustaba andar sola por los sitios, con la música a todo volumen dejándose llevar y pensando en lo que esta bien y lo que está mal. Dejando fluir lo que no puede decir hablando porque se supone que lo ha aceptado, lo ha admitido y lo ha dejado pasar como cuando en las fábricas, la cinta no se para. Tan solo pasa a otra caja, a otra bolsa, a otro alimento.

Cada paso que daba pisa charcos de agua fría. Con furia, con desgana. Y las lágrimas no salían de sus ojos. No quería ser débil. Nunca lloraba delante de gente otra vez. Estaría bien. de eso no cabía duda. Pero tardaba demasiado. Y aunque dejara de pensar en ese desencadenante, al final siempre estallaba. Una madre muerta, un padre alcohólico, un hermano mayor adicto a las drogas, un hermano pequeño que lloraba aun por las noches. Un ex novio que salía con su mejor amiga, un grupo de amigos que la dejaban de lado y sobre todo sus complejos. Cualquiera de esos problemas pude ser el desencadenante, y ella ahí estaba, manteniéndose firme, fuerte. Inquebrantable.

Y siguió caminando con la musica a todo volumen, sin llorar, solo con las manos en los bolsillos y calada por la lluvia. Solo necesitaba calmarse, necesitaba ser fuerte por los demás. Ya olvidaría mañana.

Hola a todos, quiero recalcar que esto no es real, tan solo ideas que se me vienen a la mente para hacer reflexionar sobre las situaciones que puede haber en el mundo. Espero que os guste y acepto sugerencias sobre lo que puedo escribir. Besos de Denna :3