No te pintes los brazos.
Todos nos hemos pintado alguna vez con rotulador, o boli, las manos, los brazos, las piernas...(?)(Eso ya son casos extraños), ya sea bien para recordar algo (chuletas en exámenes, eh?), o simplemente tatuarte tu nombre, el de una persona muy querida, o una frase épica.
A través de los poros...






