El sueño de Sara
El otro día me acordé de Sara, una compañera de clase que vino nueva en tercero de primaria, su padre encontró trabajo de carpintero aquí, en España, venían de África, pero el abuelo paterno de Sara les enseño a todos sus hijos inglés y español, y así hizo su padre con ella.
Sara era un poco callada, solo un día oí que vivió en la pobreza, nada más que hablaba en los trabajos de clase no mucho más, pero eso sí, era muy aplicada en los estudios, y no se metía con nadie, es más, si se metían con ella éramos los que lo viéramos los que teníamos que avisar al profesor, pues no quería problema alguno.
Poco a poco, me fui llevando cada vez mejor con ella, en los recreos me quedaba con ella, y un día, aquel 18 de febrero, hablamos de lo que teníamos pensado hacer en un futuro próximo, me lo preguntó, yo nunca me había planteado eso de ''un futuro'', quizá hasta que no terminará Bachillerato no me pondría a pensar en ello. Así que improvisé y pensé lo que más me gustaba hacer, que era dibujar, pensé que estudiaría Bellas Artes. Ella me contó que cuando tenía tres años llegaron muchas personas a rodar una película, titulada Lágrimas del Corazón. La historia trataba de unos enamorados que se escapan de una cárcel, y que en realidad los encerraron por error. Me lo contaba con tal sentimiento que creía que veía la película, después de esto me contó que desde ese mismo instante quiso ser actriz, yo pensé que triunfaría, y le hice prometer que si llegaba a ser actriz que me enviara una carta explicando su éxito.
Pasaron años, hasta que me llegó una carta desde Hollybood, en la carta ponía:
Hola Alejando, no sé si te acordarás de mí, soy Sara, tu antigua compañera de clase, un día te prometí una carta con mi éxito, bueno, pues, esta es...
Cuando terminé Bachillerato estuve dos años trabajando de camarera, con lo que gané pude hacer una carrera, tras eso, fui a Hollybood, la ciudad de las estrellas, allí comencé a trabajar como actriz y conocí a James, mi marido, el trabaja en Imagen y Sonido, tengo dos hijos; John y Edgar. Quiero darte las gracias por los años que has estado a mi lado en lo bueno y en lo malo, espero que a ti también te esté llendo bien, saludos de tu amiga Sara.
Mi respuesta a esta carta fue:
Hola Sara, gracias por acordarte de mí, también me va bien, trabajo como dibujante en Madrid, si comes tú o tus hijos cereales Crunch, el gato que aparece lo inventé yo. En cuanto a familia tengo tres hijos, una hija llamada Clara, de diez años, y dos mellizos, Kevin y Óscar. Me alegro de que triunfaras en la vida porque si lo has conseguido ha sido gracias a tu esfuerzo, saludos, Alejandro.
Esta historia enseña que no hay imposibles, sino retos, y que no importa el pasado de tu vida, sino como quieras superarte a ti mism@...




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