Desconocidos.
Tu mirada, Inglés.
¿Recuerdas aquella tarde, por las calles del centro de una ciudad llamada Lisboa, cuando, en aquella esquina, al lado del teatro nos vimos por primera vez?
Tú eras alto, rubio, y vestías informal, pero arreglado.Estabas ahí, mirando el mundo a través de esos grandes ojos verdes.
Yo iba despistada, disfrutando aquella hermosa ciudad, observando, con una mirada sin rumbo…
Hasta que de repente, te vi.
Ahí estabas, parado, sin apenas inmutarte con mi presencia, mirándome fijamente a los ojos, haciéndome sentir una completa estúpida, una estúpida perdida completamente en tu mirada.
Sonreíste…
Te sonreí…
Me demostraste que hay cosas que valen más que las letras, que los sonidos, que las palabras…
Y ahí, en ese momento, se creó nuestro pequeño mundo. El resto, el alrededor, se paró durante unos segundos para dejarnos paso a nosotros, para que esa dulce sensación inexplicable fuese interminable.
Me mirabas, te miraba, y tu mirada hacía ver que el verdadero amor puede ser algo tan simple como un roce sin manos…
Se paró el mundo, no existió más que un nosotros…Tú, desconocido, te volviste imprescindible en mi vida.
Tres segundos, dos desconocidos reconocidos, una mirada.
Perfecto.
Pero todo lo perfecto, acaba siendo imperfecto… Esa mirada terminó, la quietud de la multitud volvió a ponerse en marcha y nuestras miradas se separaron, aunque no sin resistencia. Dejar atrás ese momento fue duro, porque no se volvería a repetir en la vida, desconocido… O al menos así pensábamos, Inglés.
Porque volvimos a nuestro camino, como si todo hubiese sido un sueño, un producto de nuestra imaginación o una imagen de cuento de hadas.
Me parecías irreal, un ángel, algo salido de mi cabeza…Eras miles de pensamientos cuyo origen era incierto.
Pero, qué caprichoso es el destino, que después de varias horas, de varias subidas y bajadas por la ciudad, de varios suspiros tristes y de empezar a asimilar que no ibas a volver, reapareciste.
Reapareciste bajo esa noche estrellada de agosto, junto a un bar cercano al balcón de mi casa, cuando yo ya estaba diciendo adiós a esa ciudad, cuando al día siguiente todo este sueño se convertiría en una rutina, cuando ya tenía las maletas hechas para acabar.
Esta vez, en aquellas, mis últimas horas en Lisboa, nuestra mirada no fue temerosa, pero al verte ahí sentado, me dio un vuelco el corazón. Respiré e intenté volver a mirarte.
No pudimos evitar sonreír, fue un juego de miradas. Tú la mantenías, eras más consciente de que este sueño se volvía a repetir, mientras que yo, más temerosa, te miraba, bajaba la vista, y sonreía. Continué así un par de veces, a medida que avanzaba la calle y pasaba más cerca de tu lado.
Hasta que te tuve casi enfrente, y tus ojos me miraron con asombro, con mucha quietud…
Y nuestro mundo volvió a funcionar. El exterior se paró, nuestros labios se miraron, pero no dijeron palabra. Nuestra mirada fue una, y nuestra sonrisa, estúpida.
Yo continué caminando, indecisa. No sabía si acercarme, si decirte o no todo lo que me hacías sentir, desconocido…
Pero nunca tendría tanto valor dado que había mucha gente fuera de nuestro mundo, e iba a perder el tren.
Pese a todo, no hay que olvidar nuestro último momento; ese en el que me di la vuelta y te dije adiós, un adiós sin palabras, un adiós que significaba que nunca te iba a olvidar, un adiós proveniente del corazón. Y tú, mientras tanto, aumentabas cada pulsación de todo esto. Como si del primer vals de una adolescente se tratase, me mirabas, pero tu sonrisa también era de despedida aunque en ella se veía que tenías la esperanza de que esto volviese a pasar una tercera vez.
No sería así.
Torcí la calle, y lo primero que hice, Inglés, fue girarme para ver si aún estabas, si aún podía verte, aunque fuese un último momento. Pero en lugar de volver a crear un mundo, sólo encontré un muro, un muro que me tapaba de tu mirada.
La esquina no me dejaba verte, y ahí acabó nuestro sueño.



Comentarios
spidrmancoy - hace más de 12 años
Me encanta... ¿Entonces, el chico se llamaba Inglés? (Es que no se si lo he entendido bien)
julialalala - hace más de 12 años
Jajaja, es una forma de llamarlo :3
rocio_dreamcatcher - hace más de 12 años
me encantaaaa
julialalala - hace más de 12 años
:)
No se pueden incorporar más comentarios a este blog.