Nostalgia
Todos nos hemos parado a pensar alguna vez desde nuestro presente en el pasado; con una vida medio hecha me pongo a recordar aquellos tiempos en los que era más transparente que el crital de un vaso. ¿Recordáis esa sensación?
Cuando aquel al que admirabas no te hacía caso, cuando dejabas de prestar atención a las lecciones que la profesora se esforzaba en darte, para mirarle desde la última mesa de la última fila.
Transparente como las lágrimas que derramabas cada noche en ese silencio que se ahogaba entre los dedos de tus manos.
¿Recuerdas cuando te ponías guapa para que se fijara en ti? Cuando él babeaba cada vez que otra pasaba delante suya, cuando eras capaz de hacerle los deberes con tal de que sonriera y él nunca se daba cuenta de tu presencia. Siempre observándole desde la otra punta del mundo con tal de no molestar.
Aquellas noches en las que las lágrimas se sustituían por un sueño en el que le abrazabas y él te correspondía, pero luego... despertabas. Volvías a la realidad de aquella rutina en la que no eras nadie; una niña, fea, bajita, plana.
¿Recuerdas cuando nadie se quería acercar a ti?
Desde el futuro miras aquellos días oscuros y darías lo que fuera por querer repetirlos una y otra vez porque cualquier sufrimiento no es suficiente.
Darías lo que fuera por seguir soñando en esa nube a la que nadie puede hacer caso, que nadie puede destruir. Seguir observando desde esa última fila, pensar en que algún día se podrá fijar en ti aún sabiendo que eso nunca pasaría. Volver a sentir esas ganas de gritarle al mundo lo mucho que le quieres y, sin embargo, cuando lo gritas descubres que ninguna voz es lo suficientemente alta como para sentirte saciada.
Vuelves la vista al presente y te das cuenta de que todo lo que querías lo vas consiguiendo poco a poco. Que ese vaso cristalino se ha tornado a un color rosado y que, por fin está lleno de gente que se ha ido y de gente que ha venido recientemente. Ese vaso tiene el agua que tanto te sacia, los recuerdos y buenos momentos siempre quedarán guardados ahí mas no puedes obligar a que todos se queden porque se rompería. Un vaso roto, por mucho que intentes arreglarlo, nunca va a ser el mismo vaso.
Con el paso del tiempo vas madurando, vas creciendo y dejando esa vergüenza atrás, aquello con lo que no podías lo guardas en la mochila y te haces fuerte, poco a poco, cargando con ello. Por eso, hay que recordar el pasado como una fuente de fuerza. Cuando estés mal y quieras rendirte mira atrás y recuerda por qué estas luchando.
I been waiting on the other side...





Comentarios
corcheita44 - hace más de 11 años
Precioso. De verdad me he emocionado. Esa forma de expresarlo me ha encantado. ¡Enhorabuena!
180holas - hace más de 11 años
Tiene razón corcheita, está muy bien =)
partyflipo - hace más de 11 años
Escribes muy bien Lissie... qué bien tenerte en Cibercorresponsales :-)
jma$ - hace más de 11 años
Me ha encantado pero... Dices ''bajita'' como si fuera algo malo, un insulto sin embargo los bajitos suelen llegar a lo más alto, la estatura no es importante y te lo dice aquel que está en 4º de la ESO y se camufla con los de 1º, al que sus amigos le llaman ''Hobbit'' familia Bolsón de la Comarca ¡Porque David venció a Goliat! ¡Respeto a los Hobbits!
lissie - hace más de 11 años
No quería referirme como algo malo en realidad, sino que este texto expresaba como me sentí en una época bastante lejana cuando ser bajita fue uno de mis mayores complejos. Aunque fuera un complejo, las cosas se superan y estoy contigo en eso, la estatura no importa pero hubo una época en la que me sentía así y solo quería expresarlo :) Solo añadir que al igual que la estatura hay muchas más cosas físicas que no importan como ser gorda o delgada, tener los ojos azules o negros, el pelo largo o corto etc.
akioni - hace más de 11 años
A mi nunca me ha llegado a suceder esas cosas de pensar en un chico y hacer lo imposible para que se fije en mí pero puedo llegar a imaginármelo y pienso que en realidad ese ideal es una tontería pues en la vida te puede suceder lo que no te esperas y el que nunca pensabas que podría fijarse en tí está siempre contigo en la cabeza. Yo soy bajita y sí, me gustaría ser más alta (haber si algún ciber sabe algún secreto para crecer y nos lo cuenta XD) pero sé que una persona te aprecia por lo de dentro, no por lo de fuera. Por cierto, me ha gustado mucho tu post :)
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