Adrenalina
No me sentía a salvo en ningún sitio. No podía dejar de pensar en lo que me iba a picar aquello. ¡No podía volver a perder! Sería la tercera vez consecutiva que perdía ese día... no lo podía permitir.
La fuente no me quedaba muy lejos, en mi mano un amenazante globo rojo lleno de agua con un nudo y una pompita, y en mi bolsillo aun me quedaban casi diez globos bien guardados. ¿Cuántos le quedarían a el? "Hmm... ya me ha dado cinco veces y yo solo le he dado dos... tengo que ser mas rápida y tengo que llenar más globos. No puedo seguir aquí parada."
Había conseguido localizarle, estaba detrás del tobogán, a menos de ocho pasos de mi. No me había visto. La fuente se situaba en el centro de la plaza, al descubierto por completo, y solo se entrometía en mi camino un árbol fino y alto. No lo pensé más, salí de mi escondite detrás de el toyota azul y eché a correr lo mas rápido que pude intentando no resbalar con las zapatillas empapadas. Era muy incomodo, la ropa se me pegaba al cuerpo, estaba calada. "No se ha movido, parece que no me ha visto." Empecé a llenar globos lo mas rápido que pude y a atarlos. Inflé cuatro, justos para los dos bolsillos y tres en las manos. Me escondí detrás del balancín. No era el mejor escondite pero al ser pequeña me cubría prácticamente entera. Empecé a pensar en una estrategia. Algo me interrumpió. Sentí como me salpicaban gotitas de agua fría en la espalda. Me había visto. Sacando un poco la cabeza por encima del caballito de madera y pude ver que se había subido a la cima del tobogán. Desde allí se veía todo el parque.
Corrí todo lo rápido que pude hasta la caseta, subí las escaleras de cuerda y justo cuando terminé de subir el ultimo peldaño sentí como se reventaba otro de sus globos en el suelo. Me incorporé lo mas rápido que pude y con todas mis fuerzas lancé uno de mis globos hacia el tobogán. Le di. "Parece que no se lo esperaba, ya vamos cinco a tres. Aún puedo remontar" Había lanzado mi globo azul. Ya solo me quedaban cuatro. Metí la mano en el bolsillo y.... ¿Y MIS GLOBOS? ¡Se me habían caído! Me asomé con cuidado y exactamente, allí estaban, detrás del balancín... ¡Y yo en la otra punta del parque! Vi que mi primo bajo del tobogán, iba hacia el banco. No podía fallar. Cogí el globo amarillo y lo lancé con todas mis fuerzas. "¡Le he dado!" Aún estaba celebrándolo cuando nuestros nombres retumbaron por el parque. Se había acabado. Mire hacia la derecha y allí estaba mi abuela. Esperando con una zapatilla en la mano a que acudiésemos a la llamada. Nos iba a caer una buena...
Vi que se dirigía hacia donde estaba mi abuela y casi por instinto fui tras el y me escondi deras sullo. Estabamos los dos empapados, estaba callendo la noche y teniamos que estar en casa hace más de una hora. ¡Nos iban a matar! Entonces me fijé, ¡Solo tenia un globo! Era pequeño y de color negro, en cambio yo aun tenía tres. De no haber sido por que nos vinieron a buscar habría ganado. Estaba satisfecha :)




Comentarios
180holas - hace más de 11 años
Eso si que es adrenalina jajaja
peke* - hace más de 11 años
o si jajaja sobretodo cuando te vienen a buscar un poco cabreados XD Ahí si que se dispara la adrenalina
partyflipa - hace más de 11 años
¡¡Grandísimo!! Qué divertido
No se pueden incorporar más comentarios a este blog.