Cibercorresponsales

Pandora.

Publicado por patete el 12/11/2015 · Categorías: Pensamientos, Creación, Sobre mí, Concurso Y tú, ¿qué?, Derechos de infancia

A lo mejor ya era hora de explotar y desaparecer una pequeña temporada. He llegado a un punto en el que he de abrir mi caja:

Estoy harta de tantos gritos e insultos en mi casa, de tantos comentarios que me hunden. No puedo estar un solo día en el que alguien no me grite o me insulte. Cansa bastante.

Cada vez que paso por delante de alguien en el instituto escucho los comentarios ofensivos hacia mi persona, las risas y los dedos señalándome. ¿Creéis que sigo siendo la misma persona que era hace dos años? La verdad es que hay gente que me da pena porque veo que no tienen fondo y que se dejan manipular por los demás por el simple hecho de que prefieren agredir (ya sea emocionalmente o físicamente a una persona) a pararse y pensar en conocerla.

Los profesores. Este tema me molesta bastante, ya que por ser repetidora ya hay profesores que no me dejan ni hablar en clase, preguntar en un examen o simplemente intentar resolver algunas dudas. ¿Habéis pensado que no he repetido porque no quería estudiar sino porque he tenido serios problemas personales?

No puedo dormir porque mi cabeza me mata con pensamientos negativos, la gente juega conmigo y con mi tiempo. Se piensan que estoy aquí para cuando ellos lo necesitan y el resto del tiempo no existo. Jugáis con mi tiempo, Cronos no debe estar orgulloso. Sinceramente, me da asco la gente así.

Me habéis robado las ganas de escribir, ¿sabéis lo qué es eso? Me paso noches enteras llorando porque tengo bloqueos en los que me doy cuenta de que mi persona es totalmente innecesaria en este mundo lleno de basura, de almas en pena y de clones. Sobre todo lleno de clones.

Necesito desaparecer, solo quiero ver a dos personas y realmente esas dos personas son las únicas que de verdad me están ayudando. De verdad que solo me siento libre con ellos dos, consiguen que me ría hasta que me entre hipo, que reflexione hasta tal punto que me replantee mi propio punto de vista. Consiguen hacerme pensar, estoy harta de las conversaciones vacías, pero sobre todo estoy harta de personas vacías.

Que paren el mundo, porque yo me bajo aquí mismo.